Algo Así sucedió una mañana…por la Moraleja
Es sábado, brilla el sol, y lo único que te pide el cuerpo según te levantas y subes la persiana es salir a celebrar que la primavera ya está aquí. Mi forma de celebrarlo es salir a comer, me encanta, y si encuentro sitios cerca de casa en los que no he estado, la felicidad es todavía mayor.
Hoy os traigo Algo Así, en La Moraleja. Lo sé, tengo que moverme más, que últimamente no salgo de la zona, prometo que el próximo post será en un lugar más céntrico. Comimos en la terraza, que todavía está cubierta, pero tiene un ambiente muy agradable. Me gusta cómo ponen la mesa, muy blanca y mucha sensación de limpieza. Tienen mesas altas y mesas bajas y detallazo: manta por si tienes frío. La verdad es que no entré a ver cómo era por dentro, la verdad es que ni se me ocurrió. Fallo mío. Pero la terraza,muy agradable.
Pedimos para compartir las croquetas variadas, luego entre tres pidieron dos escalopes de ternera y yo pedí steak tartar, que hace mucho que no lo tomaba y después… postre.
Las croquetas me encantaron. Fue una pena no poder probarlas todas, pero son bolitas pequeñas, prácticamente de un sólo bocado, y éramos cuatro, así que no tomé tantas. El surtido es de croquetas de puerro, de boletus, de sobrasada, de jamón, de pollo al curry y de queso azul. A mí me tocaron dos de puerro y una de boletus, así que tampoco os puedo decir cómo están todas, pero por lo general encantaron.
El escalope era enorme, asustaba, menos mal que lo pidieron para compartir. Dos para tres. El empanado se desprendía un poco, pero estaba muy bueno, y la carne tenía una textura sensacional, tierna y hecha en su punto. Viene acompañado de una gran ración de patatas con pimientos de Padrón. No se quedaron con hambre, desde luego, y sí, lo pedirían otra vez.
El tartar era enorme, no cuesta terminárselo, pero era muy grande. El plato en sí me pareció un poco ordinario. No sabía a nada. Mira que es difícil que un tartar no sepa a nada con la cantidad de cosas que lleva. Pues oye, como 200 grs de carne sin sabor. Todo un logro. Ninguna gracia, nada jugoso. Un desastre. Además, a un tartar no le pegan ni con cola unas patatas fritas.
De postre pedí yo sola la pirámide de chocolate blanco y bueno, pues sí, es un postre curioso, no se sabe cómo atacarlo y luego no es tan empalagoso como parece. Dentro tiene como bizcocho, nata y chocolate, creo. No estaba mal, pero he probado cosas mejores.
El servicio muy bien, muy amable y de velocidad bien. Y el ambiente para mí, el mejor, padres con niños, parejas comiendo de domingo soleado. La primavera me hace verlo todo de otra forma.
¿Lo mejor? La ubicación y el ambiente.
¿Lo peor? El tartar.
¿Volveremos? Yo no.
Precio: 20-25€/pp.
Calle Estafeta, 5
La Moraleja. Alcobendas
28109 Madrid
Teléfono: 916 501 313
Email: info@algoasilamoraleja.com