ESTE RESTAURANTE HA CERRADO
En una antigua tienda de ropa de la calle Conde de Xiquena con Prim nos encontramos actualmente con algo más que un bar de barrio moderno: La Senda de Xiquena. Sin embargo, hoy no quiero hablaros del gastrobar, sino del restaurante que se esconde subiendo la escalera protagonizada por un enorme jardín vertical.
No lleva ni siquiera un año como restaurante y ya forma parte de la vida diaria de la gente de la zona. Y no es de extrañar, ya que, además de evidentemente cuidar la elaboración, en La Senda de Xiquena a lo que verdaderamente se presta atención es a la calidad de la materia prima.
La carta es de lo más variada, tratando de preparar cada plato de la forma más tradicional pero respetando siempre el producto. Nuestras elecciones fueron dos minitortillas (una de Torta del Casar con puerro confitado y miel y otra de salmón ahumado con mayonesa de eneldo), entraña con patatas fritas, mojo verde, chimichurri y salsa de bourbon y un cuarto trasero de pollo de corral con patatas panaderas. De postre, tiramisú de dulce de leche. Sí, sí, como lo estás leyendo. Espera y verás.
El equipo ejecutivo que lo compone es un equipazo de profesional con una larga trayectoria en el panorama gastronómico. A los fogones, Ale Gamba, que como bueno argentino, controla el punto de la carne a la parrilla a la perfección y en la sala Mª Sol Porto como responsable.
¿Qué más puedo contaros?
Uno de sus puntos fuertes es la amplia bodega que poseen.
Además de la carta, cuentan con un menú ejecutivo entre semana por tan sólo 11,95€. Es necesario reservar o no tendrás mesa y abren a todas horas: desayuno, vermú, comida, afterwork (con 15 ginebras Premium), cenas y copas.
El mejor sitio para sentarse a mi gusto es al fondo a la izquierda, pegado a la ventana.
Se puede ver el fútbol en el sofá, ¡como en casa!
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| Al fondo a la izquierda |
¿Lo mejor? La sorpresa al ver el comedor.
¿Lo peor? Imposible aparcar, buscad un parking.
¿Volveremos? Seguramente.
Precio: 20-25€/pp.
